Tarta de cerveza negra.

 Muy buenos días,
 ¿cómo lleváis el martes? por aquí taconeando a ver si el sábado en la boda que tenemos no me duelen los pies, jejejeje. Soy anti tacones así que cuando llega un evento lo paso muy mal eligiendo los zapatos y en este caso no queda otra que unos dichositos tacones porque el vestido así lo requiere.
Bueno pasemos a algo más agradable, por lo menos para mi.
El sábado mientras parte del país se entretenía viendo el partidito de fútbol esta que os escribe se fue a la cocina y puso su horno en marcha para elaborar una fantástica tarta. No es por echarme flores sino porque había oído muchos alagos hacia ella pero nunca me había puesto ha elaborarla. Os tengo que confesar que pasa a ser una de mis favoritas, la subo al TOP 10.
No he hecho el paso a paso pero os la explico detalladamente para que podáis hacerla.
La receta lo miré en varias webs y blogs y me decante por esta receta que se asemeja bastante a las que leí pero cambiando alguna cantidad, no a adrede sino por equivicación.

 Ingredientes

Para el bizcocho

* 250 ml de cerveza negra , a ser posible guines. Yo use otra que es la que encontré en el super.
* 250 gr de mantequilla
* 75 gr de cacao puro en polvo, yo uso Valor
* 400 gr de azúcar
* 2 huevos
* 250 ml de nata es lo que yo puse, en la receta original ponía 140 pero me confundí.
* 1 cucharadita de esencia de vainilla
* 250 gr de harina
* 2 cucharaditas de levadura en polvo, yo uso Royal.

                                                       Cerveza que he usado

Para el frosting

* 250 gr de queso de untar
* 120 gr azúcar glass
* 250 de nata para montar

 Elaboración

Está claro que lo primero que tenemos que realizar es el bizcocho y una vez fío el frosting de queso.

En primer lugar ponemos la cerveza en un cazo a calentar sin dejar que llegue a hervir.Le añadimos la mantequilla troceada y dejamos que se derrita. Previamente ponemos el horno a calentar.
En un bol ponemos el cacao, la harina, el azúcar y la levadura o en su defecto bicarbonato. Integramos bien hasta obtener una mezcla homogénea.
En otro bol ponemos los dos huevos con la nata y la esencia de vainilla y batimos .Una vez que este todo bien integrado añadimos la cerveza con la mantequilla derretida sin dejar de batir.
A continuación vamos incorporando la mezcla de los ingredientes secos batiendo con una batidora .
Una vez que la masa es homogénea y sin grumitos la ponemos en un molde previamente engrasado.
Lo metemos en el horno a 180 º en torno a 50 min. Ya sabéis que esto es aproximado porque cada horno es un mundo.
Una vez que lo pinchamos y el palito sale limpio tenemos que sacarlo del horno, yo lo deje templar en el molde y luego ya lo deje enfriar en la rejilla.

Vamos a por el frosting:
 mezclamos el queso con el azúcar glass hasta que este bien integrada. A continuación se lo añadimos a la nata montada y tachannnn listo.
sólo queda ponérselo al bizcocho intentando simular la espuma de la cerveza, eso es lo que he leído por ahí.
Este es el resultado: 

 El primer corte

  Aquí os dejo una foto del trocito que me comí.

Os la recomiendo cien por cien, esta buenísima y no es nada complicada.
Venga vamos quiero ver fotitos.

Un beso y dulce semana para tod@.

P.D: En la próxima entrada anunciamos el ganador el libro que estamos sorteando. Objetivo Tarta perfecta, de Alma y además esta firmado por ella.

Curso de galletas decoradas con Amber Spiegel de ........Sweets Ambs !!!!!!

¡¡ Buenos días a todas/os !!

Espero que no me regañéis mucho por lo abandonado que os tengo, os prometo que no volveré a abandonaros otra vez mas de un mes y medio. No es que no haya hecho nada pero no he tenido mucho tiempo para sentarme a escribir.

Hoy os quiero contar. mientras se hornean unos cupcakes, la maravillosa experiencia vivida la semana pasada. Por fin llego el día de coger el AVE a Madrid y asistir al curso de galletas decoradas por la maravillosa Amber Spiegel de Sweets Ambs en el taller de Alma.
Si no recuerdo mal el curso lo conseguí una mañana inesperada de junio, me levante y me puse a desayunar y de pronto me acorde que era la mañana en la que  Alma, de Alma's Cupcakes, ponía a la venta el curso pero ooohhhhhh no quedaban plazas. Como somos unas agonías, se colapso la web, hubo gente que compro varios cursos por lo que unos días más tarde mientras me tomaba tranquilamente mi desayuno tuve la suerte de conseguir una plaza para un curso de dos días con Amber.
De Amber solo se pueden decir maravillas, es una persona tierna, dulce, educada y tiene unas maravillosas y prodigiosas manos. Alma, la anfitriona, no se queda atrás. Siempre estuvo atentísima a todas nosotras y no nos falto de nada. Su mami Mavi y Ari que también estuvieron con nosotras son también un amor.
Me levante a las 5 de la mañana del 16 de Octubre y cogí el AVe rumbo a Madrid a las 6,20. A eso de las 9,05 estaba en la capital del reino y cogí el metro rumbo a C/Montesa donde Alma tiene su taller y enfrente su tienda. Tengo que confesaros que llegue justita de tiempo porque me costó encontrar la calle.

Nada más entrar me recibió Alma con una gran sonrisa y un par de besos , allí estaban Amber y  casi todas las asistentes del curso. Deje mi maleta e inmediatamente me puse el delantal, nos presentamos y comenzamos.

Amber empezó explicándonos como elabora ella la glasa, hizo unas cuantas tandas a lo largo de los dos días, las consistencias, como conservarla, a rellenar galletas y  muchas técnicas. Era maravilloso verla trabajar, esa facilidad que tiene. Cuando lo ves parece muy pero que muy fácil pero en la practica es bastante difícil.

El primer día nos enseño a dar la consistencias deseada para cada cosa, teñirla, cubrir la galleta, usar su aguja mágica.Todas nos hicimos después con algunas, creo que las agotamos.
En el descanso de la comida aprovechamos para ir rápidamente a la tienda, que es cuando compre el libro de Alma Objetivo: Tarta perfecta, y después empezamos con la técnica wet on wet para hacer filigranas, rositas, ..... fue un poco estresante porque necesitas tener todas las mangas con las distintas glasas porque hay que trabajar rápido.

Después de varias galletas no nos pusieron ninguna pega para firmarnos libros, hacernos fotos con las dos e incluso me firmaron mi delantal y Alma su libro de tartas el cual estamos sorteando en facebook.

Después del  intenso día me marche al hotel a descansar ya que había dormido muy poco, necesitaba una ducha reparadora y tumbarme un ratito. Estaba tan cansada que cuando mi madre me llamo a las 20,30 estaba frita.
La segunda mañana empezó con la misma ilusión que la primera pero con un poco de penita ya que estaban todas las maletas en el taller. Eso significaba que esa misma tarde cada una se marchaba a su casita y que toda esta aventura con Amber terminaba.
Este día no estuvo Alma con nosotras porque tenia clase así que nos acompañó todo el día Ari, tan agradable y simpática como Alma y por supuesto Mavi, un amor.

El día fue también muy intenso porque hoy tocaba aprender la técnica del Brush, los canastos y los bordes a todas las galletas. Después de explicarnos detenidamente Amber el brush nos pusimos a practicar. Los 45 min que nos dio parecieron segundos.....llegaba la hora de la verdad y había que hacerlo sobre la galleta.Con la ayuda de ella quedaron decentes aunque hay que practicar muy mucho.

En el descanso de la comida volvimos a la tienda y encontré cositas nuevas, así que hice un par de compras más, unos moldes, pinceles y un termómetro de cocina.
Tras una rica comida volvimos al trabajo ya que nos quedaban los canastos y los bordes.

Al final del curso nos volvimos ha hacer fotos, nos entregaron los diplomas acreditativos de la asistencia al curso y metimos nuestras galletas en una caja para que cada una pudiese llevárselas a casa.

 Posteriormente mucho más cargada que cuando vine cogí el metro y me fui rumbo a Atocha a esperar que saliese mi ave rumbo a Málaga ya que no pude quedar con mi amiga Paola por incompatibilidad de horarios. Pao espero verte la próxima vez.

Hasta aquí mi aventura con Amber y Alma.
Un saludo a todas mis compis del curso, a Alma y por supuesto a Amber. Gracias a todas por esos dos días maravillosos.